La cuarta catequesis que el Papa Benedicto XVI, dedicada a la misión apostólica de San Pablo, fue pronunciada durante la Audiencia General del miércoles 10 de Septiembre, dentro del marco festivo del bimilenario del nacimiento del Apóstol. el Pontífice ha recordado sobretodo que la nueva condición de vida de Saúl de Tarso fue determinada por su encuentro con Cristo Resucitado; y después que él mismo hizo una distinción entre él y los demás apóstoles, los Doce « eran compañeros de vida y oyentes de las enseñanzas de Jesús»; para poder así evidenciar las tres características principales del Apóstol: haber visto al Señor y haber sido llamado por Él; haber recibido de Él una misión que cumplir; anunciar sin cesar el Evangelio, con la consiguiente fundación de iglesias. La segunda parte de la catequesis fue dedicada a la concepción que San Pablo tenía del apostolado: evocó “el autorretrato” de su vida misionera, que se encuentra en su primera carta a los Corintios (4, 9-13), y las innumerables dificultades, incomprensiones, sufrimientos padecidos para subrayar que sobre todos ellos «prevalece la alegría de ser portador de la bendición de Dios y de la gracia del Evangelio». Es la certeza de quien se saber haber sido siempre, con respecto a las Iglesias, «colaborador del verdadero gozo».
El texto de la catequesis en lengua española ha sido insertado en nuestra Página Web en el menú “Anno Paolino” (Año Paulino), en el submenú “Catequesis del Papa”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario